Regalar magia
Georgina Martínez me enseñó que se podía crear magia en el escenario.
Toda esta historia viene a mi mente después de haber visto el cortometraje “El Circo de la Mariposa”, que está en dos partes.
Recuerdo que a los 20 años decidí que quería ser bailarina de danza contemporánea. Sólo que no tenía coordinación, sentía miedo de moverme libremente por el espacio y, para colmo, Georgina gritaba desesperada: “Pilar, estás atrasando a mi grupo y no pienso permitirlo”. Yo para mis adentros pensaba: “Con la pena, mi clase de danza es el único momento en el que me siento feliz. Y no pienso dejarla”.
Después de mis clases, recorría la FES Acatlán para llegar al salón y entrenar mi cuerpo. Entonces, empecé a tomar más clases de danza para aplicarme.
Georgina Martínez nos hizo un gran regalo a mis compañeros y a mí... Nos subió al escenario. En el teatro de la Universidad, presentamos “Mi corazón es un ánfora que se cae y se rompe”. Dirigidos por ella, creabamos momentos mágicos con nuestro cuerpo, hojas secas que caían, iluminación y unos guajes llenos de agua con los que terminabamos bañándonos.
Georgina Martínez me enseñó que se podía crear magia en el escenario.
Toda esta historia viene a mi mente después de haber visto el cortometraje “El Circo de la Mariposa”, que está en dos partes.
Recuerdo que a los 20 años decidí que quería ser bailarina de danza contemporánea. Sólo que no tenía coordinación, sentía miedo de moverme libremente por el espacio y, para colmo, Georgina gritaba desesperada: “Pilar, estás atrasando a mi grupo y no pienso permitirlo”. Yo para mis adentros pensaba: “Con la pena, mi clase de danza es el único momento en el que me siento feliz. Y no pienso dejarla”.
Después de mis clases, recorría la FES Acatlán para llegar al salón y entrenar mi cuerpo. Entonces, empecé a tomar más clases de danza para aplicarme.
Georgina Martínez nos hizo un gran regalo a mis compañeros y a mí... Nos subió al escenario. En el teatro de la Universidad, presentamos “Mi corazón es un ánfora que se cae y se rompe”. Dirigidos por ella, creabamos momentos mágicos con nuestro cuerpo, hojas secas que caían, iluminación y unos guajes llenos de agua con los que terminabamos bañándonos.
Otra vez nos llevó a bailar a El Oro, un pueblo en el Estado de México. Éste tiene un teatro bellísimo que data de la época porfiriana.
Pasó el tiempo, terminé la carrera. Seguía entrenándome y con mi deseo de bailar profesionalmente. Tuve la oportunidad de ver un espectáculo danza contemporánea de Rosario Armenta que me encantó. Fue el la Casa de El Lago en Chapultepec. Al terminar, esperé a que los bailarines salieran para felicitarlos y me quedé platicando con Toño Ayala. Después empecé a entrenar y a bailar con ellos en “La Fábrica de teatro, danza y otras ocurrencias”. Disfruté mucho el participar en las propuestas artísticas de Rosario Armenta y la verdad le agradezco mucho el haber tenido la oportunidad de hacer danza con ella.
"El Circo de la Mariposa" está dirigido por Joshúa Weigel y ganó el concurso anual de cortos de http://www.thedoorspot.com/ Como les comentaba está dividido en dos partes y seguro las disfrutarán
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